El fiscal adjunto Stormy Soto amenazó anoche con detener a tres reporteros de televisión mientras daban cobertura al conocimiento de la medida de coerción del doctor Edgar Contreras, quien está acusado de mala práctica médica y fue favorecido con una garantía económica de medio millón de pesos.
El funcionario judicial advirtió que si los periodistas grababan o tomaban fotografías al doctor Contreras serían detenidos y retenidos en la cárcel del Palacio de Justicia, cuando es regular que luego de las medidas de coerción se tomen fílmicas y fotografías a los prevenidos en los pasillos, donde hasta ofrecen declaraciones al respecto
Seguido de esto, Contreras habló con los periodistas presentes, entre ellos Jenny Aquino, de Telesistema; Josefina Capellán, de NCDN, y Paola Ledesma, de SIN, donde se quejó de la forma alegre con que entiende la Fiscalía lleva a los profesionales a la justicia y los apresa.
También mientras el equipo de NCDN intentaba grabar y recabar información acerca del censo a las familias afectadas tras el desplome del armazón de acero de los trabajaos de la segunda línea del Metro en Gualey, un supuesto integrante de la seguridad civil de la obra le propinó una pedrada al camarógrafo Michell Liberato, para que no lo grabara en el lugar del hecho.
Las personas, que se identificaron como parte de la seguridad del Metro, estaban acompañadas por un alto contingente policial que realizaba un censo de las personas afectadas por la tragedia.
La agresión recibió de inmediato el rechazo de los moradores de la comunidad, que se quejaron de que solo eran tomadas en cuenta algunas familias para el censo.
La realización del censo se convirtió en un caos, debido a que las autoridades estaban seleccionando algunas familias y los todos los residentes de allí querían ser incluidos en los beneficios.
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