Una pequeña de 16 meses comenzó a llorar inconsolablemente, algo le dolía pero su madre no sabía qué, así que corrió con ella hasta el hospital.
Esto ocurrió en Beijing, China y para cuando se extirpó, el diente de león había florecido en parte y había crecido casi 2 cm de longitud.
Afortunadamente y a pesar de la tardanza, la planta pudo ser removida antes de que le ocasionara más daño
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